Hasta en el mundo ideal las cosas se rompen

Ayer volví de vacaciones.

Como cualquier español, dirás…

Pues mas o menos…

Mira,

 

Hemos estado en un resort que tiene unas casas de lujo a modo de cabañas muy chulas. Tienen de todo,

lavavajillas,

microondas,

aire acondicionado,

leds por todas partes como si fuese un burdel de los 90

 

Y todo recien comprado.

Hasta las casas tienen solo 7 meses de antiguedad.

 

Pues el sábado, justo el día de la megabarbacoa, justo ese día, mi casa dejó de tener luz.

No funcionaba nada y eran las 10 de la noche.

Genial.

 

Así que como buen esclavo, digo marido, ahí estaba yo, esperando al tío de mantenimiento mientras el resto se divertía…

Y el pobre hombre, de unos 50 años, con pelo blanco y gafas para cerca, lejos, muy cerca y muy lejos se puso a mirar el cuadro eléctrico a ver que pasaba…

Y como de primeras no tenía ni idea se puso a quitar tornillos y a desmontarlo todo.

 

Y, ¿sabes que?

 

Que cuando ya estaba todo desmontando me mira y me dice:

Pues no sé que le pasa…

Y se puso a quitar más cables…

Y al rato me dice

¡Ya va!

Pero no he hecho nada.

He quitado y vuelto a poner este cable…

 

La situación me recordó tanto a tantos y tantos programadores que no he podido dejarlo pasar.

Y es que en programación hay gente que prueba sin saber, por fuerza bruta, todo lo que se les ocurre a ver si dan con la tecla y gente que al menos, tiene una ligera hipotesis de que es lo que está pasando antes de ponerse a probar…

Los primeros duran poco y se desesperan.

 

Lo acaban dejando o preguntándole al compañero a ver si le soluciona el problema.

Los que saben por donde van los tiros se pueden pegar 2 días pero lo acaban solucionando.

Es una cuestión de focalizar un problema en un punto y no dispersar toda tu energía en probar y probar cosas hasta que acabes odiando la programación.

 

Así que tú decides en que lugar quieres estar cuando empieces a programar.

Si de los que saben de lo que hablan o de los que todo les suena a chino y lo buscan en google como yit.

Si quieres empezar bien, sin miedo a aprender, tengo una guía sobre el mundo de la programación que te quizás te pueda interesar.

O no…

 

Tú decides.

 

 

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